domingo, 25 de septiembre de 2011

20110912 - 20110915 - 20110919

     La visión de una sola persona puede cambiar el curso de la historia. Las acciones que este individuo genere y que impulsen a otros a la ayuda puede significar un cambio significativo en el ambiente en que vivimos. No necesitamos ser alguien demasiado sabio, demasiado rico o demasiado convincente: necesitamos tener una pasión y llevarla a cabo aunque nos cueste toda una vida. Nunca es tarde para comenzar a luchar por un sueño compartido de bienestar en el mundo en que vivimos.

     Realmente el esfuerzo que hacemos día a día por nuestros semejantes no es muy grande -ni tiene que serlo -. Basta con prender esa mecha del querer mejorarse de la gente con una chispa. Una chispa que incendie las pasiones de la gente y les ayude a salir adelante y querer crear una comunidad autosustentable.

     Es importante recordar siempre que nuestros esfuerzos, por pequeños que parezcan, generan un cambio importante en la mentalidad de la gente. Lo importante es lograr que la conciencia colectiva llegue a un punto crítico, recordando que lo importante es "no dar el pescado sino enseñar a pescar", dejando las actitudes paternalistas y asistencialistas atrás y ayudando a que la demás gente se sienta parte de una solución que lleve a la mejora de nuestra sociedad.

     Con una visión crítica, proactiva y de servicio debemos analizar la situación en que vivimos. Ver los problemas que nos aquejan y las mejores acciones para solucionarlo. Hay que mejorar constantemente la forma en que trabajamos, ajustándonos a las necesidades cambiantes de nuestra comunidad. No hay que buscar solamente nuestra propia satisfacción ni nuestro propio bienestar. El reconocimiento de nuestras acciones no debe ser nuestra única motivación a actuar, una acción que no debería basarse en nosotros sino en el desarrollo de la sociedad. Debemos crear una fundación fuerte de valores y virtudes. Hay que convertirnos en el cambio, comenzando por "el hombre en el espejo".

domingo, 11 de septiembre de 2011

20110905 - 20110908

     Es muy fácil quejarse y quejarse cuando ni siquiera tenemos información completa sobre las cosas. Es muy fácil quejarse y quejarse cuando nosotros mismos nos cerramos a los problemas, no queremos ni afrontarlos ni siquiera verlos. Vivimos en una sociedad donde nuestro más importante aliado es el conocimiento. Vivimos en una sociedad que tiene que unirse para lograr cambios, cambios que se dan con decisiones inteligentes, decisiones que vienen del análisis profundo de las situaciones que nos rodean, del análisis de nuestro ambiente.

     La pregunta fundamental es cómo podemos ser no solamente ciudadanos, sino ciudadanos responsables. Saber qué implica esa palabra: ciudadanía. Saber que más que una palabra es una perspectiva, es una actitud, es una constante lucha por nuestro bienestar y el de quien nos rodea. Tomar esa responsabilidad por nuestro hogar, la casa de todos, nuestra comunidad. Comprender que debemos ser una legión que aprenda, se informe, mejore y actúe.

     La creación de asociaciones es importante y existen muchos grupos que ponen su grano de arena para mejorar su entorno. Asociaciones en que sus miembros se han dejado tocar por la realidad, se han quitado el caso que les protegía de ver la cruda situación en que nos encontramos. Todos debemos abrir los ojos realmente y comprender que no existe el "no puedo". El no querer hacer las cosas es la única cosa que nos impide buscar el mejoramiento de nuestro entorno, porque siempre hay una posibilidad, una oportunidad por pequeña que sea, mediante la cual trabajar por nuestra sociedad.

     Es muy fácil cruzarse de brazos. Es muy fácil despotricar sin realmente alzar la voz, callar cuando se tiene que exigir, que proponer, que luchar. La senda de la responsabilidad social no es fácil, pero si las cosas fueran fáciles cualquiera las haría. El cambio puede ser atemorizante pero toma que una persona comience con él para que dos más lo hagan, y luego cuatro, y luego ocho. Si los problemas y círculos viciosos de nuestro mundo son como la Hidra, ¿por qué no aumentar de manera exponencial también nuestras actitudes positivas? ¿por qué no intentar lograr esparcir e impregnar a toda la sociedad de una nueva mentalidad? Grano por grano, gota a gota, hemos de transformar nuestra realidad. Paso a paso hemos de caminar hacia ese lugar, donde por nuestras acciones y actitudes vivimos en paz y tranquilidad.

domingo, 4 de septiembre de 2011

20110829 - 20110901

     Fin de mes y el inicio de uno nuevo. Ad hoc que el lunes termináramos de ver la historia del millonario secreto Ben Way y que el jueves comenzáramos con nuevos temas. Comencemos con el lunes.

     Ben fue creado por sus circunstancias. El hecho que le hubieran ayudado en su momento de mayor necesidad lo impulsó a que él quisiera ayudar a otros y se involucrara personalmente con la situación que, si bien no estaba 'a la vuelta de la esquina', le rodeaba. Ben siempre se manejó con sencillez e interesándose genuinamente por las personas a las que quería ayudar. Ben siempre recordó que él era una persona, como todas las demás a quienes iba a ayudar y nunca se mostró como si se sintiera por encima. Así como Ben, nosotros debemos manejarnos con sobriedad cuando ayudemos a nuestros semejantes en la medida de nuestras posibilidades y debemos buscar el bienestar de nosotros y nuestra comunidad.

     El jueves hicimos una actividad en la cual nos dimos cuenta cómo los problemas que aquejan a nuestra sociedad no son aislados, sino que uno conlleva al otro y viceversa. El círculo vicioso en que cae la sociedad no puede erradicarse atacando solamente un problema, sino creando una serie de soluciones integrales que ataquen a todos los problemas. Aún cuando como sociedad veamos los problemas y sus soluciones de diferentes maneras la unión siempre es importante, así como tener una visión clara de la situación completa, no solamente de unas pocas piezas del rompecabezas. La sociedad no puede sobrevivir en el mundo sin analizar sus problemas a fondo y ver que todos necesitamos poner de nuestra parte y atacar en todos los frentes.